El proceso constructivo de un edificio es un proceso complejo, largo y en el que intervienen numerosos trabajos y profesionales de diferentes disciplinas. Todo esto supone, en la mayoría de los casos, los inevitables sobre costes en obra.
Evitar que se produzca este aumento del presupuesto inicial requiere de una organización y coordinación clara desde el inicio, además de desarrollar un buen control durante todo el proceso de obra.
Así, conocer cada detalle del proyecto de forma precisa y el seguimiento de obra son aspectos cruciales en la gestión de proyectos de construcción.
En este blog, exploraremos como las últimas tecnologías, entre ellas, el desarrollo de un modelo BIM y el escaneado láser 3D, han revolucionado el seguimiento y control de obra, además de crear una base perfecta para el mantenimiento posterior del edificio. El proceso para consiste en:
Antes del comienzo de la obra, se realiza una digitalización con escáner láser 3D. El objetivo es obtener unos datos lo más precisos posible del estado actual del espacio en el que se desarrollará la obra. Si ya existe un edificio obtenemos datos del estado actual, y si no obtenemos datos de la ubicación y emplazamiento del futuro edificio.
A partir de la nube de puntos generada, se desarrolla un modelo BIM siguiendo la documentación técnica del proyecto. Obtendremos una réplica virtual exacta de cómo debe quedar el edificio una vez finalizado el proceso de obra.
Para un edificio de nueva construcción, el modelo BIM inicial se realizaría a partir de los planos de diseño, ya que en el escaneo inicial solo tendremos información del terreno y emplazamiento.
Es en este punto, ya se pueden ver los posibles fallos o incoherencias que podrían llegar a ocurrir durante la fase de construcción, como colisiones entre instalaciones, de arquitectura y estructura, que no haya hueco suficiente para las instalaciones, etc.
Además, se puede anticipar el comportamiento energético. Lo que conlleva un ahorro económico mediante la toma de decisiones temprana y un menor impacto ambiental con una menor producción de residuos.
Una vez comenzada la obra, se realizan una serie de escaneos en el espacio. El objetivo es recoger datos del estado y el avance que está teniendo la obra para, posteriormente, compararla con el modelo BIM inicial.
Esto nos permite controlar de forma exacta el avance que está teniendo la obra y las diferencias que está teniendo respecto al proyecto inicial. Nos servirán de consulta, por ejemplo, para comprobar cómo están colocadas las instalaciones bajo techos no registrables, e ir actualizando el modelo inicial.
La evolución de la obra puede llevar a que se realicen cambios en el modelo inicial para adaptarlas a una situación que se ha dado en el proceso de construcción. Así, el modelo As Built recoge todos estos cambios para desarrollar una réplica virtual del edificio construido con numerosa información.
Al contar con un modelo As Built preciso y actualizado, los propietarios, administradores y gestores del activo pueden planificar y ejecutar el mantenimiento de manera más efectiva. Por lo tanto, se trata de un modelo que ayuda a prevenir problemas futuros y prolongar la vida útil del edificio.
La precisión, eficiencia y capacidad para detectar problemas tempranamente hacen que estas nuevas tecnologías sean invaluables, tanto durante la fase de construcción como en el mantenimiento a largo plazo de edificios.
La industria hotelera se encuentra en una encrucijada donde la digitalización se vuelve esencial. La innovación y la digitalización hotelera va más allá de un sistema de reservas online o la presencia web. Las nuevas tecnologías emergen para dar paso a una era de digitalización desde la construcción, hasta la gestión y mantenimiento de los activos hoteleros.
Esta tecnología juega un papel fundamental para desarrollar edificios más sostenibles y eficientes, elemento muy importante para el sector hotelero.
Vamos a explorar cómo la adopción de gemelos digitales está transformando la gestión hotelera, marcando un hito en la integración de la sostenibilidad en cada aspecto del ciclo de vida de un hotel.
Un gemelo digital facilita un enfoque integral del diseño sostenible en la construcción y renovación de hoteles. Desde la concepción de un proyecto hasta su ejecución, una réplica virtual del edificio permite la simulación de diferentes escenarios previos a la obra.
Así, se optimiza el uso de recursos y garantizar la eficiencia en la construcción. Esto no solo reduce el impacto ambiental inicial, sino que también crea espacios más sostenibles a largo plazo.
La sostenibilidad en la gestión hotelera va de la mano con el cumplimiento normativo. Para una buena gestión del edificio, es fundamental realizar un seguimiento continuo de los estándares y regulaciones.
La digitalización de activos hoteleros comienza con la captura precisa de datos tridimensionales mediante escáner láser 3D. Este proceso permite la creación de un gemelo digital que reproduce fielmente la estructura física del hotel.
Un gemelo digital permite un análisis completo de cada estancia del hotel, la adaptación rápida a cambios normativos. Identificando oportunidades para reducir el consumo eléctrico, optimizar la iluminación y gestionar de manera más efectiva la climatización, entre otros.
El escáner láser 3D captura detalles minuciosos de la infraestructura hotelera proporcionando una representación virtual precisa. Además de los elementos del hotel para controlar el inventario. Mediante el análisis de estos datos en un entorno virtual y el uso de sensores especializados, es posible implementar un mantenimiento predictivo.
Esto permite monitorear en tiempo real el estado de los activos, identificando posibles problemas antes de que se conviertan en costosos fallos. La intervención proactiva no solo mejora la eficiencia operativa, sino que también prolonga la vida útil de los activos, reduciendo así la necesidad de reemplazos frecuentes.
El desarrollo de un gemelo digital también permite disponer de un tour virtual fotorrealista del hotel, generando instrucciones geo etiquetadas y avatares digitales.
De esta manera, los huéspedes pueden recibir instrucciones personalizadas que les guíen a través de las instalaciones. Interactúan con información en tiempo real de actividades y localizaciones o simulaciones de planes de evacuación y seguridad.
Una gestión eficiente y sostenible de un activo hotelero produce como consecuencia inmediata un aumento en la rentabilidad. Y la tecnología es el elemento esencial para conseguir este resultado.
La digitalización permite a los gestores del activo disponer de toda la información del edificio, comprender qué ocurre y ofrecer respuestas basadas en datos fiables.
Esto provoca un ahorro de recursos, ya que permite el trabajo colaborativo, elimina la duplicidad de tareas o desplazamientos para comprobaciones que pueden realizarse en el gemelo virtual, por ejemplo.
En resumen, la digitalización con gemelos digitales a través de escáner láser 3D y la metodología BIM no solo redefine la gestión hotelera, sino que también establece un nuevo estándar de sostenibilidad en la industria.
La adopción de estas tecnologías no solo beneficia al medio ambiente, sino que también mejora la eficiencia operativa y la rentabilidad a largo plazo.
La sostenibilidad hotelera ya no es solo un objetivo, es una realidad alcanzable gracias a la revolución digital.
En la era actual de la tecnología, la gestión eficiente de activos hoteleros se ha convertido en una prioridad fundamental para garantizar la excelencia en la experiencia del cliente y maximizar la rentabilidad.
En este contexto, han emergido numerosas herramientas revolucionarias que transforman la manera en que los hoteles gestionan sus activos a lo largo de su ciclo de vida.
La tecnología de la digitalización en 3D no solo captura la geometría del edificio, sino que también se convierte en la guía estratégica para gerentes y equipos de mantenimiento hotelero.
El uso del Mobile Mapping para digitalizar activos hoteleros aporta datos precisos, completos y actualizados en un tiempo récord, pudiendo registrarse sin interferir en la actividad diaria del hotel.
Digitalizar el activo con escáner láser 3D proporciona una representación tridimensional precisa de todos los espacios del hotel. Esto incluye tanto las áreas públicas como vestíbulos y restaurantes, como los espacios operativos y de servicio.
Este primer paso, proporciona una nube de puntos, a partir de la cual se puede crear un modelo detallado que facilita la visualización y comprensión de la disposición física del hotel.
Disponer de esta réplica detallada del espacio aporta un gran valor optimizando el flujo operativo y mejorando la eficiencia espacial. Además, permite desarrollar una experiencia inmersiva para clientes a través de un tour virtual RV.
La recopilación de datos en tiempo real mediante escaneos de nubes de puntos permite identificar y monitorear el estado de los activos físicos.
Facilita la identificación de posibles problemas antes de que se conviertan en costosos fallos. El mantenimiento predictivo basado en nubes de puntos ayuda a reducir costos operativos y prolonga la vida útil de los activos.
La gestión de inventarios en un hotel abarca desde muebles hasta equipos de cocina. A partir de un gemelo digital, se puede crear un inventario digital completo y preciso que facilita el seguimiento y la gestión eficiente de los activos.
Esta herramienta no solo agiliza las operaciones diarias, sino que también garantiza la disponibilidad de los elementos esenciales para brindar un servicio excepcional a los huéspedes.
La planificación de diseño de espacios en un hotel puede ser compleja y desafiante. El desarrollo de modelos virtuales detallados permite una planificación precisa basada en datos fiables y actualizados.
Experimenta con diferentes configuraciones de habitaciones, áreas de recreación y espacios comunes antes de implementar cambios físicos. Optimiza el diseño y la disposición para mejorar la funcionalidad y la experiencia del huésped.
La seguridad y el cumplimiento normativo son cruciales en la gestión hotelera. Disponer de unos datos conforme a la realidad del edificio facilita la verificación de la normativa del Código Técnico de la Edificación (CTE).
Además, permite simular diferentes escenarios y entrenar al personal en protocolos de emergencia, procedimientos operativos y mejores prácticas de servicio al cliente.
Cada vez es más importante cumplir con estándares en sostenibilidad, como normas ESG o disponer de un certificado BREEAM.
La digitalización mediante la captura de datos 3D permite un análisis detallado del consumo energético en todas las áreas del hotel. La creación de gemelos digitales posibilita la simulación de escenarios para optimizar el uso de la energía, identificando oportunidades de mejora y ajustando sistemas para reducir el impacto ambiental y los costos operativos.
A lo largo del ciclo de vida de un hotel, son numerosos los cambios que sufrirá el activo, especialmente en áreas como diseño, construcción, renovación y mantenimiento. En todos estos proyectos intervienen numerosos agentes profesionales de diferentes disciplinas que necesitan una comunicación clara y coordinada.
Un gemelo digital hotelero es una herramienta que aporta datos actualizados, completos y precisos en un entorno común; lo que permite disponer de una base óptima de información geométrica del activo para los futuros proyectos que se acometan en el mismo.
BIM está cada vez más presente en proyectos, licitaciones y en los requisitos que plantean los clientes. Pero, ¿como hacemos que funcione el proceso BIM? ¿Dónde y cómo podemos recoger todas las exigencias, criterios, necesidades y flujos de trabajo para que un proyecto sea éxito?
Esto se realiza mediante la redacción del Plan de Ejecución BIM. Podemos decir que son “Las reglas del juego” en el BIM. Algo parecido a un Pliego de Condiciones BIM.
El plan de Ejecución BIM o también conocido con el acrónimo de BEP o PEB, es un documento cuya finalidad es promover una estructura de trabajo y estrategias que tiene como fin gestionar el proyecto de forma eficiente.
El desarrollo de dicho plan, para facilitar la gestión de la información de un proyecto BIM, se establece en la norma PAS 1192:2013 (actualizada ya con la norma ISO 19650), donde se define como un «plan preparado por los proveedores para explicar cómo se llevarán a cabo los aspectos de modelado e información de un proyecto».
Las directrices, criterios y los usos del modelo para todas las fases, se determinan dentro de este documento pudiendo calificarlo como una especie de “Pliego de Condiciones BIM”.
Desarrollar un BEP eficaz puede definir el éxito de un proyecto BIM.
De forma general: Los requisitos del cliente se definen en un documento llamado EIR. Para la definición del BEP la empresa contratada adaptará esas necesidades del cliente al BEP.
Un símil a todo esto podría ser, cuando se presenta el Estudio de seguridad y Salud (Lo comparamos con el EIR), y una vez contratada la constructora, ésta adapta el Estudio de Seguridad y salud, generando el Plan de Seguridad y Salud, (algo parecido si lo comparamos con el BEP).
En la fase de licitación, antes de que se acuerde un contrato, un posible adjudicatario un Pre-BEP con el objetivo de demostrar su enfoque, capacidad y competencia propuestos para cumplir los requisitos del cliente o EIR en términos generales. Una vez adjudicado el contrato, la empresa adjudicada deberá presentar otro Plan de Ejecución BIM. El objetivo de este documento posterior al contrato es confirmar las capacidades en el proceso BIM.
También se presenta un Plan Maestro de Entrega de Información (MIDP) que establece cuándo se prepara la información del proyecto, quién es responsable de prepararla y qué protocolos y procedimientos se utilizarán para desarrollarla. Esto contendrá la respuesta a cada una de las necesidades del cliente: cómo, cuándo y quién.
La información se basa en una serie de Planes de Entrega de Información de Tareas (TIDP) individuales que muestran quién es responsable de cada entrega de información.
Soy Nico Heinz, arquitecto y cofundador del estudio SH Asociados, junto con Alejandro Sánchez Fernández. Tenemos un estudio de arquitectura desde el que abarcamos todo tipo de proyectos.
Actualmente nos encontramos trabajando en frentes muy diversos: residencias de estudiantes, viviendas unifamiliares, edificios para remontes en Sierra Nevada y un laboratorio.
Conocimos BIMnD en 2018 cuando nos surgió la necesidad de un escaneo para documentar un edificio que se iba a demoler. ¿Y qué manera mejor que con una nube de puntos?
Además, coincidió con nuestros comienzos con la metodología BIM y BIMnD nos dio la formación para el programa ArchiCAD.
El principal miedo era no saber hasta dónde llegar con el nivel de detalle. Las nubes son tan precisas que puedes llegar a detallar hasta el absurdo. También por el tamaño de los archivos que hacen que los requisitos de hardware sean altos.
Trabajar con nube de puntos supone un antes y un después en la forma de trabajar. La precisión es absoluta y con el visor online no se queda nada sin documentar (salvo, obviamente, los espacios ocultos).
Normalmente solicitamos un escaneado láser cuando vamos a trabajar sobre edificios existentes, aunque también hemos empleado nubes de puntos como levantamientos topográficos de entornos urbanos incluyendo la volumetría exterior de los edificios.
Y ahí nuestro flujo suele ser el siguiente:
Una vez que tenemos esa base empezamos a hacer los levantamientos del estado actual y después el proyecto.
Bueno, creo que cada cual debe encontrar su propio camino. Trabajar con BIM obviamente supone una importante ventaja, pero requiere una formación importante y el dominio de la herramienta / programa que se elija. Y el momento – en el sentido temporal – de dar el salto de CAD a BIM es complejo y suele conllevar “recaídas”.
Eso requiere una determinación especial y encontrar los flujos de trabajo propios de cada estudio.
Y el paso de los levantamientos tradicionales a las nubes de puntos es la evolución natural si uno trabaja en BIM.
Personalmente me gustaría explorar las opciones del diseño paramétrico y manejar alguno de los programas como la combinación Grasshopper / Rhinoceros, vinculados a BIM.
También la tecnología VR/AR aplicadas tanto a la presentación de proyectos de cara al cliente como a la propia construcción y la obra.
Antes de empezar a trabajar con metodología BIM, es necesario conocer unos conceptos y nociones básicas que nos ayuden a entender cómo se trabaja en BIM y cómo esta metodología de trabajo puede ayudarnos en nuestro trabajo.
Desarrollar un proyecto con metodología BIM no se trata de desarrollar un modelo exclusivamente. La tendencia es asociar el BIM con las infografías que tanto estamos acostumbrados a ver, pero un “buen uso” de metodología BIM contiene información y un lenguaje propio para comunicarse con otros softwares y profesionales con los que tenemos que interactuar.
La metodología BIM es una manera de certificar que todos los involucrados trabajan desde la misma idea y evitar falsear los planos 2D y documentación estricta.
La metodología BIM ofrece infinidad de beneficios, pero es necesario adaptar cada modelo a las necesidades del proyecto, para poder trabajarlo y gestionarlo de forma adecuada. En aquellos casos en los que no dispongamos de los requisitos, se debe ofrecer un modelo que cumpla con las siguientes premisas básicas:
Un proyecto constructivo puede trabajarse con metodología BIM de principio a fin, pero para que esto ocurra, será necesario la elaboración de un único modelo que se prepare y evolucione en las diferentes fases:
Este modelo puede ser un reflejo del proyecto básico con las utilidades que este mismo da. Este modelo se prepara para ser modificado rápida y eficazmente, para optimizar los cambios y reimpresiones. Este modelo es ideal para un uso en una fase inicial en la que el proyecto aún no está aprobado. Puede llevar los planos incluidos. Un ejemplo de modelo inicial sería un modelo de un arquitectónico entre LOD200 y LOD 300 (nivel de detalle medio).
Este modelo es un fiel reflejo de su homónimo proyecto de ejecución. Con la diferencia de que este modelo debe tener la información básica que tiene el proyecto de ejecución no solo en sus planos, sino también en la memoria y en los pliegos (ya que el modelo posee los parámetros adecuados para cumplimentar toda esta información). Esto puede ir desde un proyecto ejecución básico donde cumpla al menos los requisitos mínimos antes descritos, hasta un proyecto donde se integra todos los detalles técnicos para que se pueda realizar la ejecución de obra sin la ayuda de otro documento. Puede llevar todos los planos y detalles integrados en el modelo Nativo.
Este modelo se trata de un modelo federado, es decir, que se compone de distintos archivos de diferentes disciplinas, pero coordinados en un único modelo global. Normalmente suelen componerse de la siguiente manera:
Modelo Arquitectónico -> LOD 200 a 400
Modelo Estructural -> LOD 200 a 300
Modelo Instalaciones -> LOD 300
Este modelo se diferencia de los dos anteriores por la información que contiene. En concreto, contiene los mismos requisitos que el proyecto de ejecución, pero los datos tendrán el concepto de tiempo y ejecutado. Datos como quien ejecutó tal o cual elemento, cuando y como se ejecutó, los cambios realizados en obra, instrucciones técnicas de instalaciones, resoluciones finales… son algunos de los datos que aparecen en un modelo As Built.
Además, este modelo puede integrar la información social, empresarial o de uso del propio edificio, para mantenimiento o gestión del activo una vez entregado. Aquí es donde podemos llegar al LOD 500 siempre que haya una certificación de que la realidad y el modelo coinciden. Esta certificación puede obtenerse mediante un estudio particular o el uso de la nube de puntos.
Para el desarrollo de estos modelos es necesario una inversión de recursos más importante, por lo que hay que estar muy seguro si el coste compensa la futura necesidad de este. Lo habitual es que tenga niveles de detalle e información similares al de ejecución.
La metodología de trabajo con BIM es tan extensa que es difícil explicar todo lo que abarca en este post, pero vamos a explicar los conceptos más importantes.
El principal objetivo de la metodología BIM es la interoperabilidad y la preservación en el tiempo del activo que vamos a modelar para futuras utilidades.
Por ejemplo, para un proyecto de una reforma tendremos un modelo existente y uno de estado reformado o ejecución. Podemos trabajarlo para gestionar las demoliciones, reubicar materiales y aprovechar elementos y que quede todo reflejado en de manera gráfica en un modelo que perdure en el tiempo. Esto solo es un fragmento de los diferentes usos que tendrá el modelo (gestión inmobiliaria y mantenimiento, certificaciones, calculo, venta y gestión empresarial…).
Estos conceptos básicos de BIM tienen que tener un flujo de trabajo que hable un idioma común y comunicarse con una vía común. Es importante asegurar que todos los involucrados en el proyecto cuentan con la misma información. Así, los 4 elementos comunes básicos del flujo de trabajo en BIM son:
La metodología BIM ha revolucionado la industria AEC en términos de viabilidad económica y técnica. Pero, ¿conoces la perspectiva de BIM en los sectores de project management y facility management? Las ventajas de la aplicación del BIM aportan una gran eficiencia en la gestión de proyectos y activos.
La gestión de un activo es un proceso continuo, que pasa por diferentes fases desde el diseño del mismo hasta su demolición, y que supone el manejo de grandes volúmenes de datos, coordinación de un equipo multidisciplinar y ser responsable de muchas decisiones que marcarán el futuro del edificio.
El uso de las últimas tecnologías como la metodología BIM o la digitalización con escáner láser 3D ofrece una solución única para los gerentes de proyectos y activos. Permitiendo un mayor control de la información y ayudando a una gestión eficaz que maximice beneficios y reduzca sobrecostes.
El uso de las últimas tecnologías, la digitalización y el trabajo colaborativo pueden aportar gran valor en la gestión de un edificio.
El ciclo de vida de un edificio es complejo: desde su diseño y construcción inicial, el edificio va a ir sufriendo cambios con el paso del tiempo (ampliaciones, reformas de algunas estancias, cambios en la climatización, saneamiento, etc).
Es necesario que todos estos cambios estén documentados, se disponga de un histórico del edificio y toda la información sea accesible.
El uso de las últimas tecnologías disponibles e integrarlas desde el inicio en la gestión del edificio ayudan a disponer de toda la información completa, centralizada y precisa: la digitalización con Mobile Mapping del edificio nos aporta datos precisos y actualizados en un tiempo récord. Si además trabajamos esos datos en un modelo 3D o BIM conseguimos tener toda la información del edificio unificada en un único modelo o espacio de trabajo.
Una situación muy común para los perfiles de facility manager y project manager es disponer de planos desactualizados, información no accesible o desordenada en diferentes carpetas o necesidad de disponer en todo momento del personal que realiza el mantenimiento para conocer datos precisos de maquinaria o espacios del edificio.
Disponer de una réplica virtual del edificio en un entorno común de datos aporta una solución integral para evitar las situaciones descritas anteriormente. En ese espacio común podemos alojar toda la información del edificio: réplica virtual en 3D, planos 2D, información de proveedores, histórico del edificio, etc.
Existen multitud de posibilidades a la hora de trabajar con un CDE o Common Data Environment, únicamente debemos establecer desde el inicio que queremos conseguir y trabajar en adaptar este espacio a las necesidades de cada edificio.
Para gestionar activos o gestionar proyectos es necesario una toma de decisiones ágil, rápida y segura. Son muchas las decisiones que hay que tomar para conseguir un buen funcionamiento del edificio día a día.
En este sentido, disponer de toda la información accesible mejora el control de todos los factores que pueden afectar al edificio y, a su vez, aporta seguridad en la toma de decisiones. Elimina los huecos de información que provocan una toma de decisiones imprecisa o en base a datos erróneos.
Los temidos «sobrecostes»… y tan difíciles de prever y evitar. En todo proceso constructivo o de reformas de un activo, es un elemento que está muy presente. Es primordial cumplir con la planificación del proyecto para evitar que los sobrecostes provoquen una pérdida de rendimiento.
La metodología BIM, el trabajo colaborativo y la digitalización de un activo tienen mucho que aportar en este sentido.
Por ejemplo, con la elaboración de un modelo 4D con información complementaria para optimizar la planificación, gestión del proyecto y ejecución en obra. O un modelo 5D que aporta costes y cronograma de construcción.
Esto es únicamente un ejemplo, ya que cada proyecto es diferente y para sacar el máximo provecho de las últimas tecnologías debemos integrarlas de forma personalizada y adaptadas a cada proyecto y cada edificio.
Como hemos comentado al inicio de este post, el trabajo colaborativo es la base de la metodología BIM y también es la base que nos permitirá optimizar la coordinación de las diferentes disciplinas en la gestión de edificios y activos.
Tener información del edificio precisa y actualizada es importante, pero si no tenemos una metodología que nos permita compartir la información que necesitemos con los agentes involucrados en la gestión, faltará una parte fundamental para ahorrar recursos en cada proyecto.
En definitiva, todos estos beneficios radican en mejorar el buen funcionamiento del edificio o activo. Apostar por el uso de las últimas tecnologías aporta una solución integral que soluciona numerosos problemas en la gestión de activos.
La gestión y mantenimiento de activos puede ser más eficiente si se realiza a través de un gemelo digital. ¿Quieres saber cómo? En BIMnD apostamos firmemente por el desarrollo de gemelos digitales como aliados en la gestión de activos para el sector hotelero, industrial, hospitalario o edificación.
Puede que todavía no hayas oído hablar de este concepto, pero te lo explicamos de forma muy sencilla: Un gemelo digital es, sencillamente, una réplica virtual de un espacio o activo físico realizado con el objetivo de monitorizar, analizar o controlar los datos de forma remota.
Un gemelo digital se crea a partir de datos e información veraz, precisa y puede ayudar en todas las fases del ciclo de vida de un hotel, desde su diseño y creación, hasta la fase operacional o de mantenimiento. Reduciendo los costes asociados y permitiendo un ahorro de tiempo en cada fase.
Existen multitud de metodologías y procesos para realizar un gemelo digital. Cada empresa o cada proyecto cuenta con necesidades diferentes que requieren de un gemelo digital con características diferentes. En BIMnD trabajamos con un gemelo digital adaptado a la gestión de cada tipo de activo, se trata de un gemelo digital preciso, con información veraz y actualizada. Llevando esta idea a la práctica, los pasos que seguimos para generar un gemelo digital son:
En BIMnD trabajamos con un gemelo digital tridimensional y fotorrealista desarrollado a partir de la tecnología de Mobile Mapping, en concreto, el escáner láser 3D de NavVis.
De esta forma, una vez digitalizado el hotel o activo tendrás toda la información disponible en la Plataforma Online de Ivion Core, un repositorio único de información desde el cual podrás gestionar la nube de puntos y tour virtual de tu activo.
En resumen, un gemelo digital te va a permitir mejorar la eficiencia cualitativa y cuantitativamente, repercutiendo de forma positiva en la calidad del trabajo del equipo y permitiendo un ahorro en tiempo y coste en todas las fases del ciclo de vida de un activo.
En BIMnD trabajamos día a día en el proceso de digitalización de empresas y consideramos que este es uno de los conceptos clave para llegar a esa transformación. En el blog de hoy hemos realizado una introducción superficial al concepto de gestión de activos con gemelo digital, ¿Te has quedado con alguna duda? ¿Quieres conocer más sobre el gemelo digital?
Te invitamos a que reserves una reunión con nuestro equipo de consultores para saber más aquí.
En la actualidad, cada día aparecen nuevas herramientas que nos ayudan a plasmar la realidad de un activo en un entorno virtual. La digitalización con escáner láser 3D o la metodología BIM se convierten en nuevas formas de trabajo que permiten un ahorro de tiempo y recursos en los proyectos de construcción y gestión de edificios.
Dejando a un lado lo puramente estético, combinar la nube de puntos obtenida a partir del escaneo láser 3D con el desarrollo de un modelo BIM es la clave para obtener una réplica virtual de un activo fiel a la realidad, además de mejorar la eficiencia del proyecto.
Si te gustaría integrar la nube de puntos en tu flujo de trabajo pero aún trabadas en CAD, puedes aprender como integrar la nube de puntos en un programa de delineado aquí.
Si por el contrario, trabajas con Revit, sigue leyendo:
Para poner en contexto, una nube de puntos es una cantidad enorme de mediciones de distancia a un punto, tomado con un escáner láser 3D, dron, cámara con sensor, etc. La información fotográfica de cada uno de estos puntos, la recolección y gestión de todas las situaciones espaciales y exploraciones de los aparatos receptores, es lo que llamamos una nube de puntos.
Así, una nube de puntos nos muestra un modelo tridimensional de aquello que hemos escaneado con una fidelidad milimétrica. La visualización de una nube de puntos la podemos hacer desde distintos programas de visualización (Recap, Scene o CloudCompare) o insertar en programas que nos den una interpretación gráfica de ésta (Archicad, Revit, AutoCAD, entre otros).
La descripción de las geometrías de la nube sumado al modelado en BIM, puede ahorrarnos mucho tiempo en la toma de datos, en la creación de proyectos, anteproyectos y gestión de licencias y permisos, por ejemplo.
Ahora bien, partir de una nube de puntos y que acabe convirtiéndose en un modelo de Revit, no es una tarea automática o ausente de consideraciones y trabajo. Para obtener un buen modelo BIM a partir de una nube de puntos tenemos que tomar una serie de criterios que nos ayudarán a conseguir un modelo funcional y útil para nuestros futuros proyectos.
Aquí van diez breves consejos para mejorar nuestro flujo Nube de Puntos/Revit:
Para empezar, hay que ser conscientes de que la nube nos describe perfectamente la geometría, pero no tiene rayos X para saber de qué capas se compone un muro o lo que hay debajo de una cubierta.
Es necesaria una combinación de la experiencia y conocimientos del técnico modelador, con el aporte de fotografías, catas y soporte extra a la nube de puntos (planos, antiguos proyectos, investigación, Google maps, etc.). Además de un buen técnico con experiencia y conocimientos de modelado que realice el escaneado laser.
Rodéate de profesionales con experiencia, asesórate bien y recopila toda la información del activo que puedas, nunca sabes como de útil te puede ser.
El uso principal de una nube de puntos cuando usamos Revit es definir geométricamente nuestro modelo. Pero, ¿sabemos cuál es el fin o el uso que se le dará al modelo resultante?
No es lo mismo desarrollar un modelo para una rehabilitación integral que para el mantenimiento de un activo. Por lo tanto, no debemos modelar igual en ambos casos.
Si modelamos habiendo trazado un plan de usos y necesidades previo ahorramos tiempo y recursos en todo el proceso.
No tengas miedo a preguntar y asesorarte con los que saben, a veces solo es necesario un pequeño empujón a tus conocimientos y experiencia.
Una nube de puntos no es más que un reflejo de la realidad, y la realidad suele ser bastante más compleja que cualquier modelo BIM.
En Revit contamos con recursos como las familias, pero estas no deben ser una biblia inamovible cuando buscamos adaptarnos a una nube de puntos.
Hay herramientas que pueden usarse como una familia u otra. Por ejemplo, el muro cortina puede funcionar como ventana o elemento trasdosado y las barandas como elementos de la estructura o carpintería metálica varia, solo debes modificar los parámetros adecuados.
Cuando trabajamos con nube de puntos debemos adaptarnos a la nube de puntos si queremos reflejar la realidad, así podemos utilizar los recursos que nos da Revit para adaptarlos a nuestro trabajo, y no al contrario.
No te quedes en lo básico. En ocasiones, nos encontramos con modelados que «abusan» del uso de masas y modelados in situ que, en ocasiones, son útiles para salir del paso, pero no se puede realizar un modelo entero con ellos.
En todo modelo hay elementos que se repiten a los que conviene prestarle atención:
El trabajo extra de hoy es tiempo ahorrado para mañana.
Es importante tener una visión global del proyecto y optimizar al máximo el trabajo cuando trabajamos con nube de puntos en Revit. Haciendo uso de algunas recomendaciones es posible reducir el espacio que ocupa el proyecto en el disco duro, recudir la carga de la nube de puntos, además de reducir la carga de trabajo necesaria para llevar a cabo el proyecto.
El trabajo colaborativo es uno de los principios de la metodología BIM, por lo que aprender a colaborar es fundamental trabajes a partir de nube de puntos o no.
Cada vez más, los proyectos se trabajan conjuntamente por varios modeladores especializados, por lo que preparar el modelo para integrar al resto del equipo ahorrará tiempo a lo largo del proyecto.
Busca ayuda y asesoramiento de especialistas para adaptar tu propio método de trabajo colaborativo, además de buscar plataformas específicas para este fin, como Trimble, A360, BIMCollab o BIM link.
No necesitas un ordenador de 5000 euros y 4 monitores para trabajar la nube de puntos con Revit, con una buena memoria y una gráfica mediana puedes trabajar.
Usa el criterio de: Tu memoria debe ser al menos 2/3 del peso de la Nube. Ejemplo, Si la nube pesa 2.5GB, debes al menos tener 4 GB de memoria (memoria de trabajo, no de disco duro).
El resto de componentes hará que tu trabajo sea más o menos fluido, pero con una buena gestión, se puede trabajar con casi cualquier nube y de cualquier tamaño.
Las versiones de Revit posteriores al 2017, tienen un sistema de punto caliente. Se trata de una herramienta que te ayuda a coger el punto más cercano de la nube como referencia.
Es una herramienta muy útil cuando queremos hacer un modelo con una tolerancia de error de pocos milímetros. Además, podemos interpretar la nube buscando alineaciones normales, diferenciación por colores o por altura.
Si lo trabajamos bien, podemos documentar y ver patologías como vuelcos y desplomes.
Si trabajas con nube de puntos en Revit (o en cualquier otro programa de modelado que lo permita) asegúrate que sabes como está referenciada.
Para ello, debes responder a estas preguntas: ¿Dónde está el punto cero de mi nube? ¿Dónde está el punto cero de mi proyecto? ¿Quiero que mi proyecto esté georreferenciado?
Si dedicamos un tiempo al principio del proyecto a resolver estas dudas ahorraremos muchos dolores de cabeza. La nube cuanto menos se mueva mejor, así conseguiremos resolver problemas como actualizaciones de nubes nuevas o ampliaciones de modelo. Es importante especificar para, como y nivel de la nube que vas a usar.
Nadie aprende siendo extremadamente cauto, arriésgate a aprender a modelar y usa la herramienta de la NUBE DE PUNTOS. Al final la experiencia es un grado. Siempre puedes buscar la ayuda y el asesoramiento necesario.
Para acabar, En BIMnD sabemos la complejidad de la elaboración de un modelo BIM. No por su dificultad a la hora de elaborarlo en si, si no la necesidad de experiencia para que la calidad supere la barrera del tiempo y la utilidad básica.
Por eso, conectar y elaborar un modelo desde nube de puntos, tiene una gran cantidad de ventajas. Si además se hace un modelo de calidad, entre otros grandes beneficios, tendremos un producto multifuncional y que no quede obsoleto para futuros usos.
En este #blogBIM hablaremos sobre qué es un modelo 3D, qué es un modelo BIM y qué diferencias existen entre un modelo 3D y modelo BIM.
Nos apetecía mucho escribir sobre este tema, ya que es algo en lo que suele haber dudas y no queda del todo claro cuáles son las diferencias entre ambos modelos. Porque un modelo 3D no es lo mismo que un modelo BIM.
Un modelo 3D es una representación gráfica que recoge las características más esenciales del activo o espacio, como son características físicas o descriptivas: forma, textura, etc. En cambio, un modelo BIM además de integrar las características físicas, permite integrar otro tipo de información basada en datos: información sobre materiales, planificación y tiempos de construcción, por ejemplo.
En resumen, un modelo 3D aporta información geométrica y un modelo BIM aporta información geométrica y paramétrica.
Un modelo 3D de un edificio nos ayuda a nivel infográfico y/o visual para crear espacios y objetos en 3D y/o conocer las dimensiones de cada estancia.
Ahora bien, si necesitamos datos de elementos, productos o materiales, necesitamos recurrir a un modelo BIM que nos ayude a documentar el edificio.
El término BIM significa “Building Information Modeling”, donde es importante aclarar que BIM no es un 3D y no es un software, si no que es una metodología de trabajo colaborativa que pone el foco en la Información.
De esta forma, un modelo BIM nos aporta valor en todo el ciclo de vida de un activo: desde la fase de diseño, el proceso constructivo y la fase de operaciones y mantenimiento. ¿Cómo? ¿Qué podemos hacer con un modelo BIM que no permite un modelo 3D?
Para conseguir un modelo BIM de calidad, es necesario conocer con antelación el objetivo del modelo. El equipo de arquitectos no se limita a modelar el edificio para conseguir su representación en 3D.
Además, debe trabajar con toda la información y especificaciones adicionales para integrarlos en el modelo y que cumpla con el fin para el que ha sido creado.
La elaboración de un modelo BIM requiere de personal técnico cualificado y la inversión de tiempo y recursos es mucho mayor.
La metodología BIM presenta una enormidad de utilidades frente a un modelo 3D. No son comparables a muchos niveles, pero es muy común que se confundan.
El 3D es lo más visible dentro de la metodología BIM, pero sólo constituye una base para un sistema de trabajo multidisciplinar.
El potencial de la metodología BIM y su uso combinado con múltiples tecnologías, como la inteligencia artificial, permitirán un desarrollo futuro que aún no conocemos en campos tan dispares como la ingeniería, la medicina o la gestión de activos.
“GRUPO VIRDATED SL ha sido beneficiaria del Fondo Europeo de Desarrollo Regional cuyo objetivo es mejorar el uso y la calidad de las tecnologías de la información y de las comunicaciones y el acceso a las mismas y gracias al que ha desarrollado una Implantación en modalidad de cloud computing de una solución CRM, para la mejora de competitividad y productividad de la empresa. Esta acción ha tenido lugar durante la Convocatoria 2023 (año 2023). Para ello ha contado con el apoyo del Programa TicCámaras de la Cámara de Comercio de Granada.”
Fondo Europeo de Desarrollo Regional
Una manera de hacer Europa